Sí, es la nueva invasión urbana, y la verdad a mí sí me gusta. Lo llaman Yarn Bombing, nombre extraño, ¿no creen?
Este nuevo arte urbano teje sobre monumentos, edificios, árboles y todo lo que se ponga en su camino, a veces, con una declaración y una demanda social o política, y en ocasiones únicamente para llenar todo de colores.
Les tengo que avisar, aunque a mí me guste sigue siendo ilegal: Favor de no tejer en las estatuas de su parque o plaza más cerca.
me gusta ♥
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