Comienza la pasarela con una creación hecha misterio, por medio de una mascara que cubre al personaje detrás de ella.
Llenos de vigor, poder y personalidad cada diseño tenía fuerza grabada en cada detalle.
La variedad nos mostró pantalones de tiros bajos, remaches, capuchas, plumas, chalecos y sacos en tonos negros, cafés y grises.
Los zapatos, botas y bolsas atraían la atención del público, quitándonos el aliento. Y a pesar de tener vida propia no dejaban de ir acompañando a las prendas en perfecta armonía.
Tan espectacular fue la entrada como la salida, presentándose un ángel negro como caído del cielo bajo una identidad desconocida que daba cierre al desfile de poder y fuerza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario